viernes, 17 de junio de 2011

El misterio de Stonehenge


Durante más de 800 años, nuestros ancestros prehistóricos, utilizaron el lugar abierto hoy en día conocido como Stonehenge situado cerca de Amesbury, en el condado de Wiltshire, Inglaterra, a unos trece kilómetros al norte de Salisbury para celebrar sus ritos. Pero hacia 2000 a.C. ese pueblo comenzó a erigir el monumento enigmático que conocemos hoy en día: cinco trillitos que forman una herradura en el centro del círculo. Cada uno consta de dos columnas de piedra de 50 toneladas de peso y 6 m de altura, y un dintel de 7 toneladas encima de áquellas.
Para levantar cada una de las columnas, los investigadores se han puesto de acuerdo en que, los hombres de aquella época, harían un hoyo de 2.4 m de profundidad con cada una de sus paredes en pendiente; usarían astas de venado como picos y omoplatos de bueyes como palas. Luego trasladarían la piedra hasta el hoyo sobre rodillos de madera de tal modo que cada uno de sus extremos colgara sobre la pared en pendiente. Miles de hombres harían un colosal esfuerzo para alzar el otro extremo de la piedra haciendo palanca con postes de madera y deslizando troncos por debajo para sostenerla.

Conforme colocaban más troncos la piedra comenzaría a inclinarse hasta que se deslizaba por la pendiente y caía en el hoyo. Como el enorme monolito seguramente caía con violencia hasta la otra pared del foso, ésta debió de ser protegida con estacas para amortiguar el impacto.

Stonehenge se construyó en tres etapas durante un lapso de casi 1700 años. Se calcula que el monumento fue erigido en 1500000 jornadas de trabajo, con turnos de 1000 obreros a la vez.
La primera etapa se inició hacia el año 2750 a.C. unos 200 años antes de que los egipcios comenzaran a construir las pirámides: un círculo formado por dos terraplenes separados por una zanja; dentro fueron hechos 56 hoyos equidistantes llamados los Hoyos de Aubrey en memoria de John Aubrey, que fue el que descubrió su existencia. Estos hoyos parecen ser túmulos de enterramientos, sin urnas ni objetos funerarios, pero con señales de cremación, como si se hubiesen utilizado para determinados sacrificios o ceremonias en honor de ignorados dioses.

Hay una entrada en el lado noreste del círculo donde se alza un imponente bloque de arenisca conocido como la Piedra del Talón; desde donde se puede ver salir el sol justo por encima de él cada 24 de junio. 

La segunda etapa se inició hacia el 2100 a.C. Fue en esta etapa cuando erigieron las 80 grandes piedras de color azulado colocadas en dos círculos  en el centro del monumento.

La última etapa duró desde 2000 hasta 1100 a.C. emprendido por los primeros hombres de la Edad del Bronce, quienes quitaron el circulo de piedras y levantaron en su lugar un anillo de unas 30 columnas de arenisca unidas por dinteles de piedra. Luego erigieron los cinco trillitos y levantaron de nuevo las piedras en dos grupos. Por causas que se desconocen, la construcción de estos círculos de piedras azules quedó interrumpida, quedando por colocar las piedras de la entrada, cuyos hoyos ya estaban excavados. Lo más probable es que hubiera alguna guerra con los pueblos que a fines del Neolítico ya poblaban las Islas Británicas, obligando a dejar abandonado el templo. 
Posteriormente, Stonehenge pasó por diversas frases de renovación y construcción cuyas fechas son imposibles de precisar. Dichas piedras fueron labradas con un leve abultamiento en la parte intermedia para que parecieran rectas vistas desde abajo. El anillo de arenisca fue realizado con tal precisión, que su cima está perfectamente nivelada; los dinteles fueron cortados en forma curva para que juntos parecieran un círculo. Finalmente el monumento quedó completamente terminado hacia el 1100-1500 a.C. en la forma que se ha conservado hasta nuestros días aunque actualmente de los cinco trillitos solamente quedan tres en pie.
Ahora bien… ¿Porqué y para que generaciones enteras alzaron este misterioso y enigmático monumento?

Diodoro de Sicilia
En realidad se desconoce la respuesta a estas preguntas aunque hay numerosas teorías, desde que era un monumento religioso o funerario hasta un sistema antiguo de predicción astrológica. Existe una teoría que relaciona Stonehenge con los Hiperbóreos, pues el historiador Diodoro de Sicilia (siglo I a.C.) escribió que los constructores de tal templo de piedra podían ser los hiperbóreos, una raza legendaria adoradores del dios Apolo, cuyo rasgo principal era la inmortalidad además de ser descritos como gigantes. No hace falta suponer que a los romanos les venía de fábula convertir el culto pagano a estos monumentos a los de su propia religión con este tipo de fábulas. 

Otros como Geoffrey de Monmouth (aproximadamente 1100-1154 dC.) en la Edad Media, relataba en sus crónicas la creencia popular de que el conjunto era un circulo de gigantes petrificados, de allí que se le conociera como la "Danza de los Gigantes". Pero el mismo escritor del siglo XII nos ha hecho llegar otra leyenda que sugería que las piedras fueron llevadas allí por el Mago Merlin, desde Irlanda, con la ayuda de unos "artefactos", para conmemorar un entierro masivo de bretones. 

Posteriormente, según el historiador, los círculos de menhires sirvieron de lugar de enterramiento para Ambrosio, tío del Rey Arturo y su hermano Pendragón, padre del Rey Arturo, teoría que luego, en el siglo XIII, fue desacreditada por completo. Lo cierto es que por aquella época este monumento fue recordado a las vigas en las cuales se colgaban a los criminales, por lo cual empezaron a conocerlo como "Stonehenge" (La horca de piedra o la piedra del ahorcado).

En ese mismo siglo XVII apareció en escena John Aubrey (1626-1697), escritor y estudioso de la antigüedad quien estudió los monumentos megalíticos de Inglaterra, y sugirió por primera vez que Stonehenge era un templo construido por los druidas. Ese mismo siglo William Stukeley realizo un estudio que reiteró y expandió el origen druídico de Stonehenge. No hace falta deciros que esta teoría es totalmente descabellada puesto que los druidas, nada tenían que ver con Stonehenge, puesto que dicho complejo megalítico existía desde dos milenios antes.

El misterio y la magia de Stonehenge continuaron en el hablar de la gente. Algunos le atribuyeron poderes curativos, entre ellos el poder de hacer fértil a cualquier pareja que durmiera en sus terrenos. Estos y otras suposiciones hicieron que las iglesias romanas consideraran estos sitios como templos paganos, sitios en donde las brujas realizaban ritos en favor de Satanás. Inmediatamente los sitios fueron anatemizados y a punto estuvieron de ser destruidos. Algunas gentes utilizaron sus piedras como material de construcción en los pueblos vecinos, y en no hace muchos años algunas exóticas agrupaciones de presuntas brujas y druidas modernos llegaron a celebrar aquelarres en sus inmediaciones.

En 1901 Sir Norman Lockyer confirmó un secreto a voces que circulaba respecto a Stonehenge: una persona al pie de la "piedra del altar", observando hacia la "piedra talón" podía observar con gran exactitud el sitio por donde sale el Sol durante el solsticio de verano.

Numerosos arqueólogos y astrónomos siguieron indagando en este asombroso misterio hasta dar con una teoría que es la que más se aproxima a la función que podía desempeñar Stonehenge. Al igual que la "piedra de altar" y la "piedra talón" se alinean para mostrar el punto de salida del Sol en el solsticio de verano, de igual forma los dos montículos y menhires ubicados junto al foso circular están alineados para apuntar hacia las salidas y puestas de sol durante los solsticios de verano e invierno. También marcan las salidas y puesta de la Luna durante los solsticios de invierno. En otras palabras Stonehenge era un templo dedicado a los movimientos del Sol y de la Luna. Un antiguo observatorio astronómico que servía para predecir los eclipses de Sol y de Luna para realizar primitivos rituales

Parker Pearson
Otros en cambio, afirman que más que como sistema de predicción de eclipses, el monumento no era más que un templo para adorar al Sol y la Luna y colocado de tal forma que a nuestros ancestros les era más fácil predecir las estaciones con la llegada de los solsticios convirtiéndose así en un lugar sagrado. Lugar de ritos funerarios como lo confirman los diversos restos desenterrados en diversas partes del recinto. De hecho, el arqueólogo Parker Pearson, profesor de Arqueología de la Universidad de Sheffield, en Reino Unido, considera que Stonehenge fue construido como un monumento pétreo para albergar los espíritus de los muertos.
 
El equipo de Pearson descubrió un sitio prehistórico similar a Stonehenge, pero más pequeño, y que se encuentra ubicado a unos dos kilómetros del famoso círculo de piedras. Los investigadores llamaron al lugar “Bluehenge”, por el color azul de las 27 piedras galesas colocadas en el lugar. Las piedras ya no están, pero queda la hilera circular de hoyos. Según los investigadores, este nuevo círculo data de hace unos 5.000 años, el mismo tiempo en que se construyó Stonehenge, por lo que al parecer es una versión en miniatura de la misma. Las nuevas excavaciones revelan que los hoyos estaban comunicados por extensas avenidas de procesiones que conducían hacia otro gran círculo hecho de madera - que representaba el mundo de los vivos. Durante el día más corto y el más largo del año ambos monumentos se alineaban con la salida y la puesta del sol. 

Restos de antigua casa neolitica
Pearson también descubrió restos de ocho casas del periodo Neolítico cerca del Bluehenge. El principal núcleo de casas se agrupa a lo largo de una impresionante avenida de piedra que conecta al sitio donde estuvo el círculo de madera en Durrington con el río Avon. Cada una de las viviendas mide 5 metros cuadrado y estaba construida enteramente de madera, con pisos de piedra o arcilla, pero lo que más llama la atención es que su antigüedad también data de alrededor de la época en la que se construyó el Stonehenge

La avenida en Stonehenge, dicen los arqueólogos, está alineada con el amanecer del solsticio de verano. La avenida de Durrington, en cambio, se alinea con el atardecer del mismo día. ¿Casualidad? Quizás el mismo asentamiento de viviendas formaba parte o era la extensión del mismo rito que se producía en el monumento Stonehenge. 

 Dos edificios más fueron descubiertos lejos del asentamiento principal, hacia el extremo occidental de la fosa. Estos edificios adicionales estaban rodeados por una cerca de madera y un dique, los investigadores afirman que pueden haber sido las casas de los jefes o sacerdotes, que probablemente vivían separados del resto de la comunidad o puede que fueran casas solamente usadas para los rituales, ya que, al contrario que en los otros asentamientos, aquí no hay indicio alguno de residuos domésticos

El arqueólogo cree que antiguamente en Durrington Walls había hasta 300 viviendas, convirtiéndolo así en el mayor asentamiento neolítico hallado en Gran Bretaña, cuyo objetivo central parecía haber sido el gran círculo de madera. Según este descubrimiento Stonehenge podía ser un lugar para los muertos, mientras que Durrington Walls era un lugar para la vida

Hay incluso una teoría aún en estudio que afirma que en Durrington Walls, al final del Neolítico y después de la construcción inicial de Stonehenge, tendrían lugar la celebración de fiestas rituales como la llegada de los solsticios; los pobladores del neolítico llegarían de todos los rincones de la región para celebrar el solsticio de invierno, en el que tenían lugar banquetes descomunales. Gran cantidad de fragmentos de cerámica y huesos de animales encontrados en Durrington parecen respaldar esta idea. Dientes de cerdos prehistóricos hallados en el sitio sugieren que los animales fueron sacrificados cuando tenían nueve meses, lo que ubica la jornada de sacrificio durante el período del solsticio de invierno, tal vez justo a tiempo para el festín. 

Después de las grandes fiestas en Durrington, los habitantes del lugar bajaban la avenida y depositaban los restos humanos en el río Avon. Sus aguas los llevaban corriente abajo, hasta Stonehenge. De este modo las cenizas de casi todos los muertos se confiarían al río de tal forma que el mismo actuaba como una vía hacía el inframundo, razón por la que este río bien podía ser la base sobre la cual se creó la leyenda griega del río Estigia, río que constituía el límite entre la tierra y el mundo de los muertos. En cambio, otros restos cremados, especialmente escogidos, quizás de la elite de la sociedad, se depositarían ceremoniosamente en el mismo  Stonehenge.

A pesar de lo que este hecho entraña, que es la función funeraria del Stonehenge, los arqueólogos avisan de que seguramente este monumento tuvo muchas más funciones que esta y que aún hay mucho por descubrir.

Sea como sea Stonehenge siempre será objeto de misterio, leyenda y magia, un sitio del que, sin duda, aún tenemos mucho que aprender. Yo lo veo como una inmensa catedral erigida en honor a los astros y misterios de la naturaleza. ¿Y vosotros?

martes, 14 de junio de 2011

El destino de los hijos de Lir




Hoy os traigo una bellísima leyenda celta que ya hace tiempo que leí y que creo merecedora de ser compartida y comentada por todos vosotros. Su título original en irlandés antiguo es: Oidheadh Chlainne Lir , Clann Lir" o "Leannaí Liry” y es una de las historias tradicionales irlandesas más enigmáticas y conocidas. La leyenda es parte del ciclo mitológico irlandés, que consta de numerosos cuentos en prosa y poemas que se encuentran en los manuscritos medievales. Aunque el núcleo de la historia podría haber sido compuesto en el siglo XI, el texto más antiguo data del siglo XVI, con algunos párrafos adicionales escritos en el siglo XVII.

Antes de nada tengo que decir que el tiempo es muy problemático en este tipo de leyendas. Los celtas no tenían una concepción lineal del tiempo, de hecho, era más comúnmente percibida como eternos círculos en espiral englobados dentro los unos en los otros. El pasado es el futuro y el futuro es el pasado, el presente para los celtas en cambio es lo que ha sucedido y sucederá.
La Leyenda

Tras la batalla de Tailltin, los Tuatha de Danann se reunieron para designar un nuevo rey: Bobd Dearg algo que no agradó demasiado a  Lir, rey de la Colina del Campo Blanco, quien abandonó la reunión sin despedirse ni hablar con nadie; ya que pensaba que él mismo era quien tenía que ser rey. A pesar de esto, Bobd fue coronado como rey por unanimidad. Posteriormente se persiguió y atacó a Lir y se quemó su casa al no aceptar al nuevo rey. 

La vida siguió su curso hasta que una gran desgracia se cernió sobre Lir, ya que su esposa murió tras tres noches de angustiosa enfermedad. Este hecho le afectó duramente dejándolo en la más triste depresión. Las noticias llegaron a oídos del nuevo rey, que reunido con sus mejores hombres, pronunció:

-Si Lir quisiera, mi ayuda y amistad le darían buen servicio, tras la muerte de su esposa. Porque aquí tengo a tres jóvenes muchachas, mis propias hijas de cría (La costumbre en Irlanda en esa época era que los hijos de las familias nobles se entregaban a otra familia para ser criados y educados.) con la mejor figura, apariencia y prestigio para él.

Con apoyo de los allí presentes se enviaron mensajeros a Lir con la oferta, oferta que Lir aceptó escogiendo a la mayor de las jóvenes, Aobh como su esposa. Con el paso del tiempo la mujer dio a luz a una hija y un hijo: Finnuala y Aobdh. Más tarde le daría otros dos hijos: Fiachra y Conn. Sin embargo Aobh murió durante el parto, lo que afectó gravemente a Lir, y solo por el amor y dedicación a sus hijos pudo evitar morir de pena. 

Aoife, la esposa de Lir.
Nuevamente las noticias llegaron a la mansión del rey Bobd quienes lloraron a Aobh con gran desazón. Tras ello el rey decidió que la amistad con Lir debería renovarse con un nuevo matrimonio con la hermana de Aobh, Aoife. Lir aceptó la proposición ya que así sus hijos tendrían una nueva madre. Aoife mostró al principio un gran afecto y consideración por los hijos de su hermana; de hecho no había siquiera una persona en el reino que al ver a los cuatro niños no llegara a amarlos de todo corazón. 

El rey Bobd acostumbraba a menudo a ir a la casa de Lir, por el amor que profesaba a los niños a los que solía llevar a su propia casa para pasar allí largas temporadas y así transcurrieron los días calmados y felices hasta que un fuego de celos descontrolado se prendió en el alma de Aoife, la cual empezó a mostrar gran desagrado y odio hacia los hijos de su hermana. 

Simuló estar enferma durante casi un año entero como treta para reclamar aquella atención que se le había rechazado a favor de los hijos de Lir. No terminaron ahí sus celos ya que un día ordenó que prepararan su carro de caballos, subió a los cuatro niños en él y se fueron hacia la casa de Bobd Dearg; pero Fionnuala no tenía intención de ir con ella, ya que sospechaba que su madrastra tenía en mente algún malvado plan, alentada por un sueño premonitorio en el que se le indicaba la traicionera actitud que Aoife albergaba en su mente. Sin embargo, no pudo hacer nada al respecto ni escapar de los males que estaban por venir.
Cuando estaban lejos, Aoife mandó a sus servidores matar a los niños dando como recompensa cualquier cosa que ellos quisieran, sin embargo todos se negaron a hacerlo. Al observar aquella imprevista negativa, Aoife sacó una espada para dar muerte a los niños; mas por ser mujer y no tener la fortaleza y coraje necesario no fue capaz de hacerlo

Continuaron su camino hasta llegar a Loch Dairbhreach, el Lago de los Robles, donde descansaron los caballos; Aoife entonces hizo que los niños fueran a bañarse al lago. En cuanto vio que estaban en el agua, los golpeó con una varita druídica y les dio la forma externa de cuatro cisnes, blancos y hermosos. Y esto fue lo que ella dijo:

-Iros, hijos de Lir, vuestra suerte os ha abandonado para siempre; triste será vuestra historia cuando sea contada a vuestros amigos; y vuestros gritos y sollozos serán oídos por bandadas de pájaros para siempre.



Y Fionnuala le contestó:

-Bruja; ahora sabemos que ese es tu nombre, nos has golpeado sin esperanza de ayuda o de respiro; más aunque nos arrojes de ola en ola, veces habrá cuando toquemos tierra. Conseguiremos ayuda cuando seamos vistos; ayuda y todo lo que necesitemos; y aunque tengamos que dormir en las aguas del lago, en nuestras mentes siempre estará la idea y el propósito de salir de allí. Una muy mala acción es la que has hecho y un mal pago de nuestra amistad, el destruirnos sin motivo o causa alguna; ello será motivo de venganza contra ti, te hará caer en desgracia; y ahora proclama los límites del tiempo que estos encantamientos han de durar en nosotros.

-Lo haré-dijo Aoife.- Hasta que la Mujer del Sur y el Hombre del Norte se unan no se romperá mi encantamiento. Nadie podrá devolveros vuestra forma humana hasta que hayais pasado 300 años en Loch Dairbhreach, otros 300 años en Sruth na Maoile entre Irlanda y Escocia, y otros 300 años en Irrus Domnann  e Inis Gluaire; y esos serán vuestros viajes y vuestros destinos desde ahora.
 
Pero Aoife sintió ahora una pizca de arrepentimiento y añadió:

-Como no os puedo ayudar de otra forma, podéis no obstante conservar la voz y el idioma humano; y cantaréis siempre la dulce música de los sidh, que pondrá a los hombres de la tierra a dormir, y no habrá música en el mundo igual  a la vuestra; y vuestros sentidos y vuestra nobleza permanecerán con vosotros, para que no os sintáis demasiado desgraciados bajo la forma externa de pájaros. Debéis escuchar con cuidado ya que cuando suenen campanas anunciando una nueva fe, el final de vuestro encantamiento, y de vuestro exilio, estará cerca. Y apartaos ahora de mi vista, hijos de Lir-continuó-con vuestros rostros blancos.

Tras decir esto, Aoife regresó al palacio de Bobd Darg, quien le preguntó la razón por la que no traía a los niños de Lir con ella.

-Te lo diré-respondió ella-es porque Lir ya no te tiene aprecio, y no quiere seguir confiándote el cuidado de los niños, por miedo a que los mantengas apartados de él para siempre.

Bobd no creyó las palabras de la mujer ya que intuyó que en ellas había engaño y envió mensajeros al norte, a la casa de Lir. Cuando los mensajeros le contaron las palabras de su esposa, Lir se mostró descorazonado y triste, ya que comprendió de inmediato que Aoife había realizado alguna seria maldad contra sus hijos. A la mañana siguiente, muy temprano, se dirigió con sus ayudantes hacia el suroeste. Y cuando llegaron a la playa de Loch Dairbhreach, Lir se acercó a la orilla del lago, notando la presencia de los cuatro cisnes con voces humanas que se le acercaron rápidamente al verlo llegar. Lir les preguntó la causa de que poseyeran tal virtud, ante lo cual, Fionnuala, le relató la triste y dolorosa verdad: ellos eran sus hijos, encantados por su propia esposa debido a sus enfermos celos y no había forma alguna de deshacer el encantamiento hasta pasados 900 años. Cuando Lir y sus gentes oyeron aquello, dieron tres estentóreos gritos de pena y de dolor

-¿Podéis pensar-dijo Lir-en venir hacia nosotros aquí en la orilla, ya que aún poseéis vuestro sentido y vuestra memoria?

-Poseemos la facultad-respondió Fionnuala-de vivir con cualquier persona de ahora en adelante; pues aún tenemos nuestro idioma y la facultad de poder cantar dulce y bella música, suficiente para satisfacer y dar placer a cualquier raza humana. Permaneced aquí esta noche-continuó-y os ofreceremos esa música. 

Aoife como bruja de los aires
Y así, Lir y sus gentes se quedaron allí escuchando la música de los cisnes y durmieron pacíficamente esa noche en aquellas playas. A la mañana siguiente Lir se levantó temprano maldiciendo a Aoife con gran énfasis y se dirigió entonces al palacio de Bobd Dearg, donde fue muy bien recibido aunque el rey le reprochó que no hubiera traído con él a sus hijos. Lir, le contó al momento toda la dolorosa verdad acerca de los niños y su fatídico destino. Bobd sintió un gran sobresalto al oír todo aquello, y supo de inmediato que lo que su amigo le decía era cierto, y le gritó a Aoife un duro reproche:

-Al final esta traición será mucho peor para ti, mujer, que para los hijos de Lir. ¿Cuál es la peor figura externa que tú pudieras pensar para ti misma?-dijo.

-Lo peor que pudiera pensar sería que me convirtiera en una bruja volando por los aires-respondió ella. 

-Pues esa es la figura en que te voy a convertir ahora-dijo Bobd. 

Y sin más, la golpeó con una varita druídica, y ella se convirtió inmediatamente en una bruja de los aires, y así se fue volando llevada por los vientos, y así continúa hasta hoy, y continuará hasta el fin de la vida y del tiempo.

En cuanto a Bobd y los Tuatha de Danann, se dirigieron a las playas de Loch Dairbhreach y acamparon allí para ver y escuchar a los cisnes. Gentes desde todas las regiones de Irlanda llegaron hasta allí, porque nunca pudo escucharse una música comparable a aquella. Y las aves acostumbraban a contar sagas y a conversar con los hombres de Irlanda día tras día, y con sus maestros y sus discípulos y sus amigos. Cada noche solían cantar bellas y dulces melodías de los sídhe; y cualquiera que oía esa música dormía tranquilo y apacible a pesar de que su mente estuviera atormentada por problemas o que padeciera una larga y crónica enfermedad.

Y así transcurrieron los 300 años, momento en el que los hijos de Lir se despidieron de su padre y seres queridos con gran pena para salir hacia los solitarios parajes de Sruth na Maoile.  Aquel hecho afectó grandemente a los hombres de Irlanda, que proclamaron entonces una ley que prohibía que se matara cisne alguno, en toda la isla de Irlanda

Sruth na Maoile  resultó ser un pésimo hogar para los hijos de Lir. No hubo ni siquiera una noche de las que pasaron allí que no hubieran tenido que soportar una gran tormenta marina sobre sus cuerpos; razón por la que señalaron un lugar, Carraig na Ron, la Roca de las Focas, en el que poder encontrarse de nuevo en el caso de que los vendavales los separaran durante alguna noche.

Una noche, fuertes vientos cayeron sobre ellos al igual que enormes y salvajes olas que los barrió hasta dispersarlos a lo largo del ancho océano separándolos tan lejos los unos de los otros, que ninguno de ellos pudo saber donde se encontraban sus hermanos. Tras la tormenta, vino la calma y Fionnuala se percató de que era la única en Sruth na Maoile y de que había perdido a los demás. Con las alas congeladas, el cuerpo dolorido y el corazón roto, se dirigió a la Roca de las Focas, el lugar designado de encuentro,  y permaneció allí toda una noche despierta y vigilando hasta que al final apareció Conn. Poco después apareció Fiachra, tan debilitado que apenas podía pronunciar palabra debido al extremo frío y las penalidades sufridas. Fionnuala lo colocó bajo sus alas para darle calor y no pasó mucho tiempo antes de que pudieran ver a Aodh, con la cabeza seca y las plumas brillantes y hermosas. Fionnuala colocó a Aodh y Conn bajo sus alas de tal modo que pudiese cubrir a todos con su plumaje.

Permanecieron allí mucho tiempo después, sufriendo el frío y la inclemencia del tiempo de aquellos parajes donde no residía ser humano alguno.  Muchas dolorosas noches pasaron pero hubo una especialmente cruel con ellos; el hielo, la nieve, el viento y el intenso frío hacían mella en sus frágiles cuerpos, el agua se congelaba a su alrededor por lo que trataron de protegerse un poco descansando sobre una roca. Sus patas, alas y plumas se congelaron y se pegaron así a la roca, de modo que no podían soltarse. Tuvieron que hacer tantos esfuerzos para poder salir de allí, que dejaron la piel de sus patas, sus plumas y las puntas de sus alas pegadas a la piedra

-Qué pena tan profunda, hijos de Lir-exclamó Fionnuala-ahora sí que nos encontramos en mal estado, ya que no podemos aguantar el contacto del agua salada sobre nuestra desnuda piel, y los efectos del encantamiento que pesa sobre nosotros no nos permiten escapar de aquí. Si el agua salada impregna nuestras heridas causará probablemente nuestra muerte

Se dirigieron de nuevo hacia Maoil, y las saladas aguas cortaron hirientes sus desnudos cuerpos, sin que pudieran evitarlo o hallar medio de defensa alguno. Permanecieron allí al lado de la costa sufriendo esas penalidades hasta que sus plumas crecieron de nuevo, y sus alas y heridas cicatrizaron y se curaron. Entonces, después de tantas fatalidades, comenzaron a volar cada día hacia las playas de Irlanda o Escocia para buscar compañía humana, aunque tenían que regresar a Sruth na Maoile cada noche. Y la encontraron, un día, en la desembocadura del río Banna, en el norte de Irlanda. Eran una tropa de guerreros, bien parecidos, del mismo color, cabalgando en caballos y viajando desde el suroeste. 

Los cisnes se aproximaron a la costa para saber quiénes eran y poder entablar una conversación con ellos. Los jefes principales eran dos hijos de Bobd Dearg, Aodh y Fergus, quienes habían estado buscando a los cisnes durante largo tiempo. Les contaron que su padre y el rey se encontraban bien, celebrando la fiesta de la Edad de forma alegre y placentera, sintiendo solamente su ausencia y sin saber qué es lo que les había ocurrido desde su partida.

Los cisnes informaron de todas las penalidades que habían sufrido, reprochando su amargo destino mientras sus seres queridos disfrutaban de todas las comodidades de palacio. Los guerreros se dirigieron entonces a casa de Lir, y allí contaron a los principales hombres de los Tuatha de Danann todas las penalidades que habían tenido que pasar los hijos de Lir y el triste estado en que se encontraban. Los jefes de los Tuatha de Danann respondieron que desgraciadamente no podían hacer nada para cambiar su suerte, alegrándose de que los hermanos estuvieran vivos, y que tuvieran paciencia puesto que al final de los tiempos obtendrían ayuda.

Los hijos de Lir escucharon todo aquello de los guerreros que volvieron para transmitirles el mensaje y asintieron con resignación. Pasaron los días hasta que llegó el tiempo en el que pasó el tiempo estipulado y tuvieron que dejar Sruth na Maoile para ir hacia Irrus Domnann, donde tuvieron que aguantar más penurias y extremos fríos. Lo único que les alentaba en aquellos trágicos momentos era el saber que al final recibirían ayuda. Y así pasó el tiempo hasta transcurrir los 300 años

Los cisnes se alegraron muchísimo puesto que podían por fin, volver a Sidhe Fionnachaidh, donde residía su padre y seres queridos. Más cuando llegaron allí, lo encontraron todo vacío, nada en pie salvo verdes montículos y matorrales de ortigas, ni una casa, un fuego, una piedra-hogar. Los cuatro se abrazaron con fuerza y exclamaron tres grandes gritos de duelo.

A continuación, permanecieron esa noche en el lugar donde había estado la casa de sus padres y abuelos, donde se habían criado, y donde cantaron dulcemente. Al día siguiente marcharon hacia Inis Gluaire, su último lugar de exilio. Todos los pájaros de la isla se unieron a ellos en el Lago de los Pájaros. Los cisnes solían ir a buscar comida a lugares apartados de la isla regresando luego cada noche a Inis Gluaire.

Fue en esa época cuando se encontraron con un hombre joven y noble, Aibric, que se fijaba mucho en ellos. Los cánticos de los cisnes eran tan dulces para él que les cogió un inmenso cariño, sentimiento que era reciproco. Fue este joven quien contó la completa historia de lo que había ocurrido, y la puso en orden secuencial. La historia fue pasando de boca en boca y de generación en generación hasta convertirse en leyenda.

Una nueva era había comenzado en Irlanda y los Tuatha De Danaan habían sido reemplazados por otra raza. Los viejos dioses se habían retirado al otro mundo y la gente ahora adoraba al dios cristiano.

Una noche, los hijos de Lir escucharon el sonido de una campanilla, que tintineaba cerca de ellos. Los hermanos se asustaron al oírla, todos menos Fionnuala quien recordó las palabras de Aoife: el sonido que les avisaría del fin de su exilio y así se lo contó a sus compañeros. Siguieron escuchando aquel sonido de la campanilla hasta que ellos mismos comenzaron a cantar. 

Un ermitaño, Mochaombrog, que conocía la leyenda de los hijos de Lir, les escuchó y supo enseguida que eran ellos. A la mañana siguiente se dirigió inmediatamente al Lago de los Pájaros, y se acercó a la orilla ofreciendo su ayuda y consuelo. Los cisnes confiaron en el hombre quien los llevó consigo a su morada. Luego llamó a un buen herrero y le pidió que fabricara finísimas cadenitas de plata para ellos, y colocó una entre Aodh y Fionnuala y otra entre Conn y Fiachra con el fin de que así no se separasen jamás los unos de los otros.

Mientras tanto Lairgen, un rey del norte, se casaba con una reina del sur, Deoch, y a través de este matrimonio, la última parte del encantamiento de Aoife se rompió.
 
La nueva reina pidió los cisnes como regalo de bodas, jurando que no pasaría una noche más con su esposo a no ser que le trajera los pájaros, así que el rey viajó hasta Inis Gluaire para buscarlos. Cuando Mochaomhog rehusó tal orden, el iracundo rey alzó la cadena que unía a los asustados cisnes y los sacó a rastras. Se resistieron con fuerza por un momento, pero de repente Lairgen y el ermitaño vieron con horror cómo las plumas de los cisnes caían y en el suelo, casi muertos, yacían cuatro arrugados y frágiles ancianos, sin sangre o carne alguna. Mochaomhog se apresuró a su lado e intentó consolarles, pero Fionnuala le dijo que sabía que estaban muriendo y le pidió que los bautizara y enterrara en un lugar donde encontrasen paz.

Los hijos de Lir fueron entonces bautizados, muriendo poco después. Fueron enterrados como Fionnuala había solicitado: Fiachra y Conn en cada uno de sus lados y Aodh ante su rostro. Se colocó una piedra plana sobre ellos, y sus nombres fueron escritos en ella con ogham (un críptico alfabeto céltico), y fueron llorados allí mismo, y sus almas ganaron el cielo. 



Y ese fue el destino de los hijos de Lir.


jueves, 9 de junio de 2011

Llamador de angeles


Creo que todos algunas veces hemos visto o escuchado acerca de los llamadores de ángeles también llamadas bolas de armonía o bolas musicales. Este talismán tan peculiar consiste en una bola de plata que puede variar en tamaño, colores y diseño; en su interior suele contener trozos pequeños de plata o piedras semipreciosas creando ese bello sonido que produce al agitarlo y que nos ayuda a que nos sintamos relajados. 

Muchos países se han atribuido su creación sin que sepamos a ciencia cierta dónde radica su verdadero origen. Existen teorías tan estrafalarias como que un  joyero alemán se inspiró en una antigua campana o esfera druida para diseñar estos instrumentos, y otras más elaboradas como que fueron creación de los propios celtas como instrumento antiguo de meditación o que su procedencia viene de culturas tan enigmáticas como la india o la china. Las primeras manifestaciones que se conocen de su uso se remontan a la época medieval como amuleto de protección estando presente en infinidad de culturas. La verdad es que es imposible rastrear cuándo y cómo fue su verdadero origen aunque sí podemos deducir que se han originado de forma tradicional en una serie de regiones y como hemos dicho de ciertas culturas, incluyendo Bali y México

En Bali, isla de Indonesia situada entre China y Australia, por ejemplo, es un símbolo tradicional desde que se tiene memoria. Este antiguo talismán hecho a mano, contiene dentro de la esfera un pequeño xilófono originario de Bali o una pequeña bola sonora que crea un sonido particular y mágico. La campana está hecha de bronce y la bola o el diseño relicario está hecho habitualmente de plata esterlina. La mayoría vienen con un pequeño cristal o piedra semipreciosa en la parte superior además de poseer un mecanismo de apertura que al abrirse pone al descubierto la esfera sonora que se puede quitar. Se utiliza principalmente para la relajación y la meditación; el sonido que emite es un excelente calmante para el alma y ayuda a promover el equilibrio interior y la armonía tal como dice su nombre (bolas de armonía). Según  diversas fuentes indonesias estos objetos circulares eran usados por los curanderos en brazos y piernas  para las danzas rituales, representando una particular danza de armonía universal. 

Llamador de angeles de Bali
Por lo general es un símbolo de calma, relajación y meditación utilizado desde que se tiene memoria por mujeres embarazadas tanto en Bali como en otras zonas, rasgo principalmente común en todos estos países durante siglos y generaciones. Suele llevarse como collar con una cadena larga a la altura del ombligo (el Chakra del corazón) para que el llamador toque directamente la piel del vientre de la embarazada. 

 Una antigua costumbre balinesa es que estos amuletos sean utilizados por las embarazadas para tranquilizar al feto que reposa en su vientre materno. Los bebés recién nacidos reconocen el sonido de la bola de armonía de su madre al nacer y se tranquilizan. También suelen darse a menudo a los mejores amigos como recuerdo o representación de amistad eterna

Para los balineses, la música es muy importante (denominada gamelán) considerándose algo sagrado, tanto que se cree que tiene poderes y efectos sobrenaturales. Casualmente El gamelán cuyos instrumentos son principalmente instrumentos de percusión, de cuerda y de viento  es una forma de conexión del individuo con el grupo de tal forma que todos participan con su esfuerzo logrando una armonía perfecta que se refleja en el espectador produciendo efectos inmediatos: relajación, equilibrio tanto mental como espiritual, eliminación de estrés, etc. Los balineses piensan que cada instrumento contiene o representa un espíritu en concreto por lo que su música es principalmente tocada en ceremonias religiosas e importantes tales como bodas, cremaciones, etc. Es muy posible que estas antiguas creencias y tradiciones fueran el germen del que nació el llamador de ángeles, un instrumento cuyos efectos beneficiosos e incluso terapéuticos nos dan la meditación necesaria para alcanzar el equilibrio perfecto. 

No es casual que estos objetos se usen en el Feng Shui, (una antigua filosofía que nació en China hace más de tres mil años) para limpiar o armonizar cualquier ambiente incluido el de las viviendas, donde se colocan en puertas, terrazas o balcones; en resumidas cuentas, en todas aquellas estancias con poco flujo de energía en las que activamos el movimiento necesario para el equilibrio y cuyos efectos varían de acuerdo con la ubicación, número de llamadores de ángeles y sonidos que sirven para la limpieza y renovación de energías.

Existen rumores no demostrados de que el origen de los llamadores en México puede derivar de antiguas tribus sudamericanas que usaban estos llamadores cuando las mujeres estaban encintas o en el propio niño después de nacer a modo de protección o en el lugar donde solía dormir. 

En la antigua tradición mejicana la bola significa suerte para la futura madre y su bebé, que les traerá buena suerte, bienestar y crecimiento y protección frente a las enfermedades. Es más, se piensa que a los bebés les aporta una cierta estabilidad emocional e incluso la creencia de que puede aumentar su coeficiente intelectual, también se dice que benefician al bebé durante la lactancia cuyo sonido ayudará a relajarle. Es por eso por lo que se aconseja a las futuras madres utilizarlo aproximadamente a las 16 a 20 semanas de embarazo, o cuando la propia madre sienta los primeros movimientos del bebé en su vientre. A partir de esta etapa del embarazo el bebé puede oír y distinguir sonidos que se escuchan a través del vientre materno. Para las no embarazadas, sin embargo, un llamador de ángeles es un símbolo de protección y relajación, un instrumento de canalización de energía que puede proteger frente al nerviosismo o el estrés. Otra función que se le atribuye es la de facilitar respuestas importantes a las dudas que envuelven a uno mismo a cambio de hacer sonar el llamador mientras se le pide al ángel la solución indicada.

Los llamadores de ángeles producen un sonido armonioso y agradable, como el de los carillones de viento solo que el sonido es más sutil y perceptible. Según la tradición y leyenda de algunos grupos de esoterismo es un sonido que avisa a nuestro Ángel Guía, el “Ángel de la Guarda”, sonido, que para él, es en realidad una llamada emitida por un ser querido o amado para que lo protega, pues los llamadores transmiten vibraciones metálicas y especiales que únicamente pueden ser escuchadas por él en cualquier lugar. Estos llamadores por tanto atraen la energía positiva representada por los ángeles convirtiéndose en una especie de conversor o receptor energético que nos protege frente la energía negativa.  

Leyendas

Existen numerosas leyendas, historias y cuentos acerca de estos peculiares objetos que hacen despertar la imaginación de la gente que las escucha proporcionando un aliciente más para adquirir un llamador de ángeles. Aquí voy a exponer las más populares. Dependiendo del país, quien lo entrega a la Humanidad u otro colectivo es un genio, un duende o un ángel, figuras que tienen una función similar en diferentes culturas, aunque el resto de la historia es casi idéntica.

Leyenda celta:


“Hace miles de años, los humanos vivían en contacto directo con sus Ángeles Guías o Ángeles de la Guarda, y que, por alguna razón, seguramente vinculada al Pecado Original, tuvieron que dejar de vivir conjuntamente con éllos. Los Ángeles, apenados por la pérdida de la compañía de los humanos, obsequiaron a éstos con colgantes esféricos de plata pura que, al agitarlos, sonaban como campanillas.”
 “Estas esferas eran un símbolo de protección. Los Ángeles se despidieron de los humanos y les explicaron que, aunque ya no los volverían a ver, si se sentían en peligro, desprotegidos o simplemente tristes, sólo necesitaban agitar la esfera, ya que, cuando escuchara su sonido, el Ángel Guía -Ángel Guardián- de cada uno, acudiría en su ayuda o compañía.”
 Los Ángeles pusieron una condición: el colgante sería de uso exclusivo y personal, pues todos tenían un sonido propio y reconocible por cada Ángel Guía -Ángel de la Guarda-, y este ángel no puede ser prestado a otra persona. Si se contravenía esta condición, la magia y protección de la esfera desaparecería. También explicaron a los humanos que el mismo colgante podía ser utilizado por una madre y su bebe mientras éste se encuentra en gestación, ya que en este estado, ambos comparten un Ángel Guía. Una vez que el bebé hubiera visto la luz, la madre debía decidir si el colgante se utilizaba para su protección o para la de su hijo recién nacido”.
 
Los duendes y los ángeles:


Cuenta la leyenda que... en la época de los primeros seres humanos: Adán y Eva… cuando Eva se encontraba lavando a sus hijos para que estuvieran presentables, apareció Dios y ella, avergonzada de los que aún estaban sucios los escondió fuera de su vista. Cuando Dios llegó hasta ella, él alabó a sus hijos limpios y pulcros, pero se dio cuenta enseguida de que Eva le estaba escondiendo a otros, los que aún no había podido lavar.
Entonces Dios con su voz atronadora le dijo que si realmente creía que daba más importancia a la limpieza del cuerpo que del alma y como castigo, hizo invisibles para los demás seres humanos a todos esos hijos de los que se avergonzaba.
De esta manera nacieron los duendes y las hadas. Los duendes son seres mitológicos elementales de la naturaleza, guardianes de los bosques y sus habitantes, grandes expertos en las ciencias ocultas.  Con el paso de los siglos, estos seres han sido relegados tras su época de esplendor a sitios cada vez más reducidos, por el egoísmo del hombre y su poco respeto hacia la Madre Naturaleza.
Cansados de este maltrato, invocaron a los seres divinos pidiendo ayuda y los ángeles oyeron sus plegarias. Como ayuda, éstos les entregaron a los feéricos un colgante como una bola que tenía dentro unas pequeñas campanillas, todo un símbolo de protección. Les dijeron que cuando se sintieran en peligro o desprotegidos agitaran el colgante y los ángeles acudirían en su ayuda al oír las campanillas. La única condición que les pusieron fue que era un objeto intransferible, solo de uso personal y que nunca deberían prestarlos, ya que si lo hacían perderían la protección y la magia del objeto. Así, los duendes llamaron al objeto mágico “llamador de ángeles”.

Los humanos y los ángeles:


A veces hasta el amanecer, cuando no sabemos con certeza si estamos durmiendo o despiertos, o en el momento del crepúsculo, cuando las sombras nos hacen dudar de nuestros sentidos, cuando intuimos presencias, susurros revoloteando, risas contenidas, la sensación de algo que no podemos definir… Son los ángeles: vienen y van, escuchando nuestros secretos y susurrando melodías para nosotros. El sonido que emite el llamador de ángeles los atrae, nos da su protección, apoyo y amor además de ser un valioso complemento en infinidad de ocasiones. Cuenta la leyenda que en los albores del tiempo, los Humanos y los Ángeles convivían en el Mundo en total armonía. Pero un día los Ángeles tuvieron que abandonar la tierra, dejando a los Hombres sin la protección que les proporcionaba. Como muestra del vínculo que les unía, hicieron entrega a los Hombres de una especie de campanillas que producían un sonido melodioso al ser agitadas. Lo único que pidieron a cambio es que su uso fuese personal e intransferible. Los llamadores no debían prestarse a otras personas, ya que perderían su magia y dejarían de funcionar. Mientras los Hombres mantuviesen su pacto, ellos volverían para protegerles y confortarles cada vez que escuchasen su llamada.

Limpieza

Al igual que para limpiar cualquier tipo de talismán o objeto esotérico el llamador de ángeles tiene mil formas de limpiarlo.
Una forma muy popular de hacerlo es coger  un paño blanco de algodón (importante) a la luz de la luna llena y dejarlo toda la noche sobre el paño a la luz. Esto es como un baño de luz purificante.

Otra forma es lavarlo con agua y sal gorda e imaginarse que el agua tiene un color azul o blanco que se lleva toda la suciedad. Cuando se imagina el agua limpia se seca y listo. También se puede dejar durante unas horas enterrado en una maceta de tierra para purificarlo.

Debido a las numerosas leyendas que circulan acerca de estos llamadores, es frecuente escuchar que el llamador de ángeles debe ser únicamente tocado y usado por su portador. Es lógico que así sea ya que es evidente que si lo queremos para llenarnos de energía positiva no debemos contaminarlo con otras energías o vibraciones que puedan llenarnos de energía de otras personas.

Es por ello que cuando alguien lo ha tocado se recomienda utilizar alguno de los anteriores métodos para purificarlo. Con alguno de todos estos rituales el objeto se limpiará y volverá a cargarse de energía positiva. Es importante hacerlo en caso de que nos lo regale alguien (algo que dicen te da más suerte pero en realidad este hecho es poco importante, sí lo es la fe que se tiene en él, algo que pasa con todos los talismanes.). Pensemos que cualquier objeto que nos regalen vendrá lleno de la energía de la persona que nos lo regaló ya que los occidentales somos muy dados a los regalos, algo que muy poca gente se para a pensar ya que conlleva sus beneficios y sus riesgos

En estos tiempos han aparecido múltiples formas y variedades del mismo objeto, aptas para todos los gustos: lisos o trabajados, grandes o pequeños, de colores, aunque el llamador original, por así decirlo, era completamente liso y se dice que realizado con alpaca. Suelen tener un precio muy asequible para cualquier consumidor siendo encontrados en tiendas de decoración y complementos o en joyerías. Independientemente de creer o no en su significado se trata de un colgante hermoso, que no pesa y que constituye un complemento perfecto para las embarazadas, que se sienten más seguras y guapas al llevarlo y para las no embarazadas ya que significa un buen amuleto vibrador de buenas y beneficiosas energías.

Artículo dedicado a DarkSoul

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